jueves, 1 de abril de 2021

A NUESTRO PADRE JESÚS NAZARENO

 



Cuando era niña, cada amanecer del Viernes Santo, me levantaba a verlo pasar por mi puerta. Luego, mientras hacía el recorrido por todo el pueblo, lo esperaba junto a mis paisanos en El Llano. Acudíamos a la representación de pasajes bíblicos y, una vez terminados éstos, lo acompañábamos a su ermita. Me dolía ver su rostro compungido y sentía una impotencia enorme al ver la imagen tan magullada y el rostro tan dolorido. Sólo pensaba entonces en cómo haberlo podido librar la maldad humana. Esta madrugada tampoco saldrá. Yo lo llevaré siempre en mi recuerdo y en mi corazón.


 

 

SONETO A NUESTRO PADRE JESÚS NAZARENO DE LUQUE (CORDOBA

 

Despójate de esa cruz hosca y fría

y acógeme en tus brazos, Nazareno,

detén presto tus pasos, ponles freno

y déjame aliviar esa agonía.

 

Huye de la maldad e hipocresía

y aléjate del que vive en el cieno,

busca guarida en mi grato seno,

de infiel suplicio yo te salvaría.

 

Limpiar tu débil rostro yo quisiera

y quitarte esa corona impía,

enjugar estas lágrimas de cera

 

con paños de piedad y de alegría,

redimir tus pies de esa galera

y ungirte con aceite de ambrosía.

                 Milagros Jiménez

miércoles, 27 de febrero de 2019

Música en la tarde



En la estancia callada, recogida,
del piano las notas escapaban,
aludes de emociones desplegaban
en la lánguida tarde adormecida.

Tras un rayo de luz entristecida,
sones suaves la soledad llenaban,
las manos el teclado acariciaban
en la penumbra dorada y abatida.

Bajo acordes de cálidas cadencias
se sublimó el cénit de armonía
y halló el corazón reminiscencias

de otra tarde de dulce melodía.
La música brotó sin estridencias
y anegó el alma de melancolía.
                                                  MjH





                                          

sábado, 1 de diciembre de 2018

Sueños






Por el corazón del río
van mis sueños navegando
en pátinas cristalinas,
sobre su nácar posados.

Sueños hambrientos que llegan
al arenal de tus brazos
y allí despliegan sus alas
meciéndose desbocados.

¡Quién fuera sueño de fuego
para bogar sin descanso
por los volantes del cielo
hasta tu ardiente regazo!
                                         (MjH)

sábado, 14 de abril de 2018

Besos robados



                                                             ( Besos de Ron Hicks)




Hacia el brocal de tu boca jugosa
corrió mi labio en salvaje embestida,
para beber la savia suspendida
en su corola fogosa y amorosa.

Y al contemplar tu cara candorosa
bajo la luz de la estancia dormida,
frené el deseo de mi loca estampida
y al instante domé mi sed ansiosa.

Pero el volcán de mi pasión ardiente
se desbordó en ríos en osadía
y mi labio voló muy diligente

hasta tu boca de dulce ambrosía.
Y allí atrapé como llama candente
besos de abril de roja malvasía.

                                      (MjH)

miércoles, 28 de febrero de 2018

Un leve roce




Un leve roce,
un roce
imperceptiblemente leve,
casi invisible,
se pasea  inocente
por el norte de mi cuello,
dibujando a ciegas
una nube enardecida,
que pone en pie
todo el territorio salvaje
de una  piel  antes dormida
en la caverna de la fría noche.

Y vibra la carne,
la carne
tercamente entumecida,
y trepa la sacudida
por los circuitos abiertos
de un  corazón virgen
que abre sus fibras,
en total anarquía,
a tus turgentes dedos,
raptores candorosos
de las olas de un cuerpo insaciable,
que atracan en un mundo nuevo .

Un leve roce,
un roce
imperceptiblemente leve,
enciende
como un relámpago
la pira de la pasión
y despliega
desaforadamente
las alas del deseo.
¡Un leve roce!
              (MjH)



sábado, 11 de noviembre de 2017

Soneto a la Peña de los Enamorados



                                  (Peña de los Enamorados. Foto de Antonio Espárraga Goody)



Te yergues echada en grave reposo
sobre solar de viejas tradiciones
y llenas de cultura los blasones,
de arte y de diseño virtuoso.

Es tu perfil severo, vigoroso,
el de un piel roja de regias facciones,
que protege la Vega y sus rincones
con nervio, con tesón, cual fiel esposo.

¡Oh Peña, se esconde en ti un gran dolor
que emana de una noche de amargura
en que muerte fatal movió el amor

e inundas de misterio y de aventura,
de belleza, de honra y pundonor
la ínclita Antequera noble y pura!

                                                            (MjH)

martes, 7 de noviembre de 2017

Yo soy muy simple






Yo soy muy simple.
Simplemente empática,
simplemente empírica,
simplemente enfática.

Yo soy muy simple.
Simplemente lírica,
simplemente autómata
y algo lunática.

Yo soy muy simple.
Simplemente nómada,
simplemente crítica,
simplemente anómala.

Yo soy muy simple.
Simplemente tímida,
simplemente díscola
y algo romántica.

Yo soy muy simple.
Simplemente unívoca,
simplemente cándida,
simplemente antípoda.

Yo soy muy simple.
Simplemente diáfana,
simplemente épica
y algo fantástica.

Y me pierdo
entre la bruma
de la duda y de la nada.

Y me despierto
soñando
en los quicios de mi cama.

Y deambulo
en las tormentas
mirando las nubes blancas.

Y camino
bajo el cielo
sin sombrillas ni corazas.

Y persigo
la verdad
por callejuelas de albahaca.

Y busco,
cuando amanece,
a Dios
con todas mis ansias.

Yo soy tan simple
que soy
simplemente humana.
                            (MjH)